Cereales Mijo Pelado en Grano Biográ (500G)

En algunos países, se lo asocia  más al consumo de los canarios que al humano; mientras que modernos estudios han demostrado que podría mitigar gran parte del hambre mundial debido a su alto nivel proteico y a que se lo considera el cereal más alcalino. Además, su cultivo posee un elevado rendimiento, ya que tiene la particularidad de que, en caso de no presentarse las condiciones propicias para su crecimiento, no se marchita, sino que espera el momento propicio y, cuando éste llega, crece y da frutos.

Dentro de la dieta, es apropiado para aumentar el aporte del trío protector: hidratos de carbono, fibras y proteínas. En otro orden, contiene 10 aminoácidos esenciales, fósforo, sodio, potasio, magnesio, hierro, calcio y sílice; vitaminas del complejo B, A, C y E.

No contiene gluten, por lo que no puede utilizarse para hacer panes esponjosos.

En otro orden, no fermenta en el estómago ni inflama los intestinos.

Es muy recomendable para aquellos que sufren disturbios del páncreas, del bazo o del estómago, tales como diabetes, colon irritable o úlcera gástrica.

Admite numerosos empleos culinarios, como ser: sopas, pasteles, budines, postres, croquetas, etc. Es bien aceptado por los niños.

Tiene más aspecto de semilla que de cereal. Existen numerosas variedades. Si desea la mejor calidad, escoja los granos pequeños, con un refrescante aroma a nueces.

Guárdelo en un frasco hermético. Si no lo emplea con mucha frecuencia puede colocarlo en la heladera; se puede cocinar sin necesidad de descongelarlo. La mejor manera de cocinarlo es poner en una olla 1 medida de mijo por 2 y 1/2 de agua, y llevar a fuego medio, sin tapar del todo la cacerola. Cuando rompe el hervor, bajar a fuego mínimo y cocerlo alrededor de 15 minutos (hasta que se consuma el agua). Una taza de mijo crudo rendirá 3 y 1/2 tazas una vez cocido, porción suficiente para 4 personas.